Polémica ha causado la medida tomada por las marcas Agrosuper (dueño de Sopraval) y Ariztía, al modificar la composición de sus productos rotulados como “pechuga de pavo”, incorporándoles carne de pollo.
En el caso de Sopraval, sus cecinas envasadas señalaban que eran de “carne 100% pavo”, pero ahora eso ha cambiado, pues la información ha sido reemplazada por una donde figuran tanto pechuga de pavo como de pollo, en ese orden (también se les agregó azúcar, ácido cítrico y el colorante carmín de cochinilla). Este cambio afectó tanto a productos al vacío como los que se laminan en supermercados.
En estricto rigor, las empresas cumplen legalmente con el manual de etiquetado nutricional de alimentos, en la correcta rotulación de sus productos, y no están obligadas a informar pública