El PRO atraviesa una de sus discusiones más profundas desde su creación. Bajo el liderazgo de Mauricio Macri , el partido se encuentra dividido en dos grandes corrientes: por un lado, los que defienden los acuerdos electorales con La Libertad Avanza (LLA) como forma de sostener el cambio impulsado por Javier Milei . Son los que ya hablan de un “ PRO original, puro, liberal ”. Por otro lado, están los que plantean que el partido debe mantener autonomía y proyectarse como una fuerza capaz de encarnar una alternativa “ postmileísta ”.
Es una discusión que se aceleró tras la decisión del PRO de habilitar libertad de acción en cada distrito, y se puso de relieve luego del cierre de listas del pasado domingo. Esa estrategia se tradujo en un mapa dispar: en 10 provincias , el partido