Los habitantes de Río de Janeiro, en Brasil, están horrorizados por el caso de una joven de 22 años, llamada Sther Barroso dos Santos, a quien le habrían quitado la vida un grupo de traficantes de una pandilla local.
Los hechos se dieron en la madrugada del domingo, 17 de agosto, en una zona al oeste de la ciudad. Según el periódico Folha de S. Paulo, Sther estaba en una fiesta de baile funk con un grupo de amigos.
Un narcotraficante del Tercer Comando Puro (TCP) llamado Bruno da Silva Loureiro, alias Coronel, también estaba en la fiesta. En medio de la noche, se acercó a Sther y le pidió mantener relaciones sexuales.
Sther se negó a tener relaciones con el delincuente y, pocas horas después, fue abordada por varios secuaces de alias Coronel. Aparentemente, los criminales abusaron sexua