El uso de herramientas como ChatGPT en un mundo donde la inteligencia artificial se ha normalizado tanto en el ámbito laboral como en el personal no se libra de riesgos. El propio Sam Altman, CEO de OpenAI, dijo que “La gente de entre 20 y 30 años utiliza a ChatGPT como un asesor de vida”, es decir, que le consultan antes de tomar alguna decisión importante, pero hay que tener cuidado con este tipo de conversaciones con el chatbot, pues puede traernos problemas con la seguridad digital.
La popular criminóloga, María Aperador, ha advertido sobre esta cuestión afirmando que “Tus conversaciones privadas con ChatGPT podrían encontrarse en Google”. Estas palabras abren un debate sobre la privacidad, protección de datos y la delgada línea entre lo intimo y publico en esta época de la inteligenc