Barcelona "Venir al Levante no fue azar, ha sido mi destino. De la misma forma que debía estar en Atocha ese 11 de marzo del 2004". La vida de Julián Calero ha estado llena de obstáculos que ha tenido que superar. Fue uno de los primeros policías en llegar a Atocha tras los atentados, vivió en primera persona la tragedia de la DANA en el País Valenciano el pasado año y vio cómo sus amigos de la escuela morían por sobredosis con sólo 16 años. Este sábado, el técnico de Parla se sentará en el banquillo del Ciudad de Valencia para enfrentarse al Barça de Hansi Flick. "He frotado el larguero de la muerte ya unas cuantas veces. Como dice un amigo mío, el hombre de la guadaña me está buscando y yo la esquivo", bromeaba Calero en una entrevista en el diario Marca .
Calero recuerda cómo logró