Los museos llevan meses en el punto de mira del presidente de Estados Unidos, Donald Trump , pero ahora el mandatario ha amenazado con disparar donde más duele: la financiación. Los ha comparado con las universidades, a las que ya ha retirado fondos federales . El gran pecado de los museos públicos, según el mandatario republicano, es que hablan del país de una manera "progresista" y "anti estadounidense".
"He dado instrucciones a mis abogados para que revisen los museos y comiencen exactamente el mismo proceso que se ha llevado a cabo con los colegios y universidades, donde se han logrado avances enormes", dijo el martes Trump, que aprovechó para cargar contra el Instituto Smithsonian —que gestiona una gran parte de los museos de Washington— porque dice que centra sus exposiciones