Tras casi dos semanas de desastre medioambiental en media España, la bajada de las temperaturas y el aumento de la humedad -dos aspectos claves para luchar contra el fuego, junto con la ausencia de viento- aportan algo de optimismo para poder controlar las llamas. Es lo que sucede, por ejemplo, en Jarilla (Cáceres), donde el fuego ha quedado estabilizado tras arrasar en once días unas 17.300 hectáreas, el mayor incendio de la historia reciente en Extremadura.
Desde hace dos semanas se han quemado 403.171 hectáreas en España
En otros focos, las llamas siguen siendo tan virulentas que, en cuestión de minutos, amenazan casas y poblaciones enteras. Durante su vista a Asturias esta mañana, Pedro Sánchez ha anunciado la celebración, el próximo martes, de una comisión interministerial de