Ocurrió en Inglaterra y las hijas pudieron así conocer la voz de su madre, que la había perdido hace años. Necesita una interfase.
Eric y Aviva crecieron sin escuchar la voz de su madre, afectada por una enfermedad neurodegenerativa, pero g racias a una antigua grabación de audio de ella, procesada mediante inteligencia artificial, ahora pueden descubrirla. Hace 25 años, mientras esperaba a su segundo hijo, Sarah Ezekiel descubrió que sufría una enfermedad degenerativa que la llevó a perder por completo la capacidad de hablar.
Tras el impacto del diagnóstico, pudo usar una computadora y una tecnología de síntesis de voz para comunicarse, pero con una voz robótica, completamente deshumanizada. Sus hijos, Aviva y Eric, crecieron por tanto sin conocer el sonido de la voz de su madre. Ha