Chivas vivía una pesadilla en la cancha de Tijuana . Estaba abajo por 3-0 y parecía condenado a la derrota. Pero con media hora por delante, el conjunto rojiblanco reaccionó y vino de atrás. En el tiempo agregado, el golazo de Roberto Alvarado concretó una remontada que pocos esperaban. Un trepidante 3-3 que le deja al Guadalajara sensaciones positivas, pues tuvo errores costosos, una vez más, pero anímicamente el equipo mostró fortaleza.

Lo del Rebaño Sagrado ha sido un desastre sobre la cancha del Estadio Caliente. La escuadra tapatía vive una pesadilla de la que no logra despertar. Es el cuarto descalabro en cinco partidos que ha disputado en el certamen. En cada uno de esos encuentros, le han marcado penal en contra. La defensa es una calamidad. Este viernes, hasta un autogol

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