La primera autoridad municipal proyecta continuar.
Después de tantear el terreno comprendió que, por ahora, es la mejor opción. Eso sí, nunca deja ni dejará de aspirar.
Así de sencillo, preguntó a sus asesores, calibró el momento, consultó con ambas corrientes partidistas y el Gran Polo Patriótico, evaluó los escenarios y decidió luchar por mantenerse cual avión, a velocidad crucero en la misma altura, sin subir ni bajar.
La jefa del ayuntamiento asumió con entereza su parte de responsabilidad en las eventualidades del 28 de julio y siguió de largo, sin detenerse.
Tamaronis -apellido de lustre sindical- se dispuso, como siempre, a trabajar, único e indiscutible secreto de su éxito en las lides públicas.
A esta hormiguita del sector gobierno, laboriosa y tenaz, no la arredran los obstá