Este verano, varias playas españolas han tenido que cerrar temporalmente el acceso al baño tras la aparición de ejemplares del llamado dragón azul ( Glaucus atlanticus ), una babosa marina de apenas tres o cuatro centímetros de longitud, pero con una reputación inquietante.
El caso más reciente se produjo en Guardamar del Segura (Alicante), donde un bañista avistó dos ejemplares en la playa de Vivers. Tal y como relató el alcalde José Luis Sáez en declaraciones recogidas por El País , la bandera roja se izó apenas media hora antes de que acabara el turno de los socorristas: “ No sabíamos si había más ejemplares varados o cercanos a la costa, por lo que pusimos en marcha el protocolo”. Finalmente, tras un dispositivo de vigilancia, no se detectaron más individuos, pero la preca