La economía de las industrias creativas (música, diseño, moda, cine y teatro) aporta cerca del 3 % del PIB, la denominada economía naranja logra diversos encadenamientos que van desde los servicios hasta los bienes, pasando por el registro de derechos de autor y el pago de regalías.

Por su parte, en el amplio universo de la música, que es uno de los subsectores más grandes de la economía naranja, hay un ritmo que viene ganando espacio, a pesar del boom del reguetón y de la denominada música popular, ese ritmo es la música Raspa, que debe su impulso a los departamentos del sur y Amazonia colombiana.

La Raspa permanece vibrando con fuerza desde ese corazón del sur, que aún es desconocido por algunos colombianos. Ese contagioso género bailable, ha acompañado a generaciones enteras, marcando

See Full Page