La gran transformación que está registrando el actual mercado laboral, con la introducción de las más modernas tecnologías, la automatización, digitalización e, incluso, los sistemas y aplicaciones de inteligencia artificial, está provocando que los trabajadores más veteranos tengan más dificultades que nunca para mantener sus ocupaciones y para incorporarse en nuevos proyectos empresariales.
En este contexto, España encabeza actualmente las cifras de desempleo sénior con una tasa cercana al 10%, más del doble de la media de la UE (4%), según Eurostat, lo que convierte al país en el único del Bloque con un dato de paro de este colectivo de dos dígitos.
Un fenómeno que castiga tanto a los afectados que sufren las consecuencias en aspectos tan importantes como el mantenimiento de su poder