Gerona En la primera pausa de hidratación a Míchel se le vio totalmente desanimado, con los jugadores cada uno en la suya, intentando frotarse las manos con las culpas. El partido, con 4-0, estaba ya resuelto. Incluso acabó algo antes que el del estreno ante el Rayo, en el que en el minuto veinte perdía 0-2. En La Cerámica, el 2-0 llegó en el minuto 16; y antes de la media hora, cualquier aficionado gerundense ya se tapaba la cara, avergonzado. Finalmente, el Villarreal lo aplastó por 5-0 y el Girona ya es el colista de la competición y lo es porque las estadísticas no engañan: lo ha perdido todo, tiene cero puntos, tan sólo ha hecho un gol y es el equipo que más ha encajado, con ocho. Pero lo peor no es eso, son las sensaciones.

Porque antes de que el árbitro pitas el inicio, mucha gent

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