La respuesta de una operadora del 911 y de la patrulla preventiva fue clave para salvar la vida de un bebé de 29 días que había sufrido principio de ahogamiento este domingo en barrio La Milka, en la ciudad de San Francisco.
El suceso comenzó cuando la madre del pequeño, llamó al 911 al notar que su hijo se ahogaba. La operadora que recibió el llamado y le brindó indicaciones precisas para realizar maniobras de reanimación. Estas instrucciones permitieron estabilizar al bebé antes de la llegada de los efectivos policiales.
Minutos después de la llamada, un móvil policial arribó al domicilio. Los agentes procedieron a trasladar a la madre junto al bebé al Hospital Iturraspe. Una vez en el centro médico, los profesionales confirmaron que el niño se encontraba fuera de peligro, disipando la