El Día D, cuando las tropas aliadas desembarcaron en Normandía, este señor ya estaba aquí: tenía 14 años y soñaba con ser actor. Cuatro años después, en 1948, pisó por vez primera las tablas de un teatro. En 1969, el año en que la nave Apolo 11 alunizó alucinantemente, se estrenó la segunda película de una filmografía, la suya, que suma los cien títulos. Ahora, a sus casi 96, sigue en el tajo, y de gira, con la obra biográfica «Una pequeña historia», escrita y dirigida por su mujer, Ángela Bacaicoa (próximas paradas: Leioa, Vizcaya, 26 de septiembre; Valencia, 10-12 de octubre). Tiene este hombre la mirada clara como el agua y una ironía sin una sola arruga, y hablar con él es conversar con la experiencia. Bendita sea la vida siempre.

Antes de nada quería felicitarle por sus 95 años. Si v

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