Hace unas semanas entrevistamos a Vangel, un músico originario de Macedonia, pero instalado en la Isla desde los años setenta del siglo pasado. Entre otras cosas, nos habló de su condición de abuelo de heroinómano y de los problemas que el consumo descontrolado de droga genera en torno a él y a su familia, especialmente a los padres de su nieto. «Y lo peor, que no hay ningún centro para ser tratado -se lamentaba-. De ahí que, si está muy mal, ingresa o le ingresan en Son Espases, donde le medican, para devolverlo a la calle, en la que, tarde o temprano, sin ningún tipo de control, volverá a caer, cosa que sucede desde hace bastantes años».
Más o menos es lo que le ocurre al sobrino de Marisa Cañas. No es heroinómano, pero sí esquizofrénico, es decir, es un tipo normal hasta que, de pro