En marzo de 2025, la Tierra recibió el impacto de una ráfaga de radio extremadamente potente que duró apenas unos milisegundos, pero cuya energía fue comparable a la que nuestro Sol produce en cuatro días.

Este tipo de señales, conocidas como FRB (Fast Radio Bursts o ráfagas rápidas de radio), han desconcertado a los astrónomos durante décadas. Son como faros fugaces que se encienden en medio de la vasta oscuridad del universo, y cada detección es un logro científico en sí mismo. Sin embargo, identificar su origen ha sido históricamente uno de los mayores desafíos de la astronomía moderna.

Ahora, un equipo liderado por la Universidad Northwestern , en Estados Unidos, ha marcado un hito. No solo detectaron el FRB más brillante registrado hasta ahora, sino que lograron triangular su or

See Full Page