Ciudad de México.- Los gobiernos estatales y los Congresos de todos los partidos castigan cada año la petición presupuestal de la mayoría de los Organismos Públicos Locales Electorales (OPLES), mientras la Presidenta Claudia Sheinbaum ha puesto en duda su continuidad.
La situación económica de estos organismos ha llegado a tal grado que el INE ha tenido que implementar un semáforo de alarma para identificar aquellos institutos que más dificultades tienen para cumplir con su obligación de organizar elecciones.
A mitad del año, en el semáforo del INE, dos entidades se encuentran en nivel alto (rojo), Zacatecas y Yucatán, pues no han recibido ampliaciones presupuestales, por lo que el Instituto federal considera que está en riesgo su operatividad.
Los OPLES de San Luis Potosí, Guerrero