Estamos de acuerdo en que no habría que ponerle límites al humor , una afirmación que en los 90 e incluso finales de los 80 era todavía más cierta que ahora. Una aseveración que aplica a multitud de temas, y las comedias de situación , como cualquier serie o película de entonces, no eran ninguna excepción .
Claro que, pese a esto, hay temas o personajes que son más difíciles de aceptar por el gran público que otros, y el nazismo suele estar entre los más rechazados , como es normal. Aunque cuenten con la versión más caricaturizada que hemos visto , hay límites que los espectadores no están dispuestos a superar, aunque se intentó .
Pequeños roces con sus vecinos
Sin éxito , claro está, pero Heil Honey, I'm Home! realmente existió , y en ella conocimos a un Hitler conve