Un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) pone la lupa sobre cómo los impuestos inciden en el precio de la nafta y revela un dato que contradice la percepción general: la mayor parte del aumento reciente no se explica por los tributos.
Entre junio y agosto de 2025, el valor real del litro de súper subió un 3%. Sin embargo, solo el 14% de ese incremento se debió al Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y al Impuesto al Dióxido de Carbono (IDC). El 86% restante corresponde a otros componentes del precio.
Al mismo tiempo, medido en dólares oficiales, el combustible bajó un 4,6%, lo que evidencia que el tipo de cambio también juega un papel clave en la formación del precio.
El estudio analiza la evolución de estos tributos desde 2018. La ley los fijó como montos en