La familia de Francisco Javier San Vicente, quien murió el 20 de agosto tras participar como voluntario en labores de extinción del incendio de Cipérez pero cuyo fallecimiento la Junta desvincula del fuego, está recopilando información sobre si se cumplieron o no los protocolos de atención sanitaria , ya que acudió varias veces al médico antes de morir.
En un escrito enviado a EFE, la familia expresa que desea mantenerse al margen de la discusión política sobre los incendios, pero ha destacado que este hombre de 45 años se encontraba " en perfecto estado de salud " y " sin dolencias previas " cuando participó como voluntario junto a otros vecinos en las labores de extinción del incendio que arrasó casi 11.000 hectáreas y que comenzó el 15 de agosto en la localidad de Cipérez.