En una causa iniciada hace menos de una semana que avanza a pasos firmes, este martes se allanaron dos áreas de Nordelta con el fin de incorporar al expediente registros fílmicos de las entradas y salidas para corroborar los movimientos del jefe de seguridad del barrio cerrado, Ariel De Vincentis, sospechado de ayudar a huir de la policía al empresario Jonathan Kovalivker, uno de los propietarios de la droguería Suizo Argentina, que ayer se presentó en Comodoro Py con su abogado.
El escenario de las diligencias encomendadas por el juez Sebastián Casanello, a cargo del proceso junto al fiscal Franco Picardi, se llevó adelante en el barrio La Isla y en el Golf del barrio cerrado.
Se trata de la pesquisa que intenta recabar información respecto a un presunto esquema de coimas ligado a la