LA VISITA QUE hoy cursarán los Reyes a las zonas devastadas por los incendios de Zamora y Las Médulas no es mero simbolismo. Es un ejercicio de responsabilidad institucional para hacer más visible el drama tras el drama, la tragedia después de la tragedia de las llamas. Más allá del paisaje y el destrozo ocasionado en unos entornos que tienen en el turismo uno de sus recursos imprescindibles, está también la vida cotidiana que arrasó el fuego. Los pastos, las setas, la miel o las castañas que en ambos territorios no darán sus frutos los próximos años. Recursos que no son mero aliciente, que en algunos casos son el sustento de un mundo rural que cuida la naturaleza de la que vive a diario. Esa es la realidad cercana, inmediata y diaria que queda tras el fuego. Los castaños de Las Médulas qu
Los Reyes, en el paisaje de la tragedia

139