Se llama Camila Fernández, es ingeniera biomédica egresada de la Universidad Nacional de San Martín y desarrolló junto al CONICET y otras universidades, un proyecto que facilita la regeneración ósea. ¿Cómo? Creó con impresoras 3D una prótesis de huesos que evita infecciones.
Por ello, Camila recibió un premio del Centro Argentino de Ingenieros, que reconoció su proyecto final de carrera entre más de 100 trabajos de distintas especialidades.
Además, su investigación abre una nueva ventana para el desarrollo de prótesis de huesos en 3D fabricadas con biomateriales que permiten que las células se adhieran, crezcan y formen nuevo tejido óseo sin provocar rechazos ni efectos tóxicos.
Ella lo explicó así en La Nación+: “Parte de mi participación fue incorporar un potencial antimicrobiano a es