Un mosaico del primer cuarto del siglo III de 27 metros cuadrados, del que se conserva en muy buen estado el 60 por ciento y que ha sido excavado este verano en Écija (Sevilla), da muestra del lujo, la ostentación, la riqueza y el elevado nivel artístico del que disfrutaron las aristocracias locales del imperio Romano. El mosaico se corresponde con el suelo de un oecus o comedor que también servía de recibidor en una casa palacio de 1.200 metros cuadrados de planta y que poseía dos alturas, y en la misma excavación se ha hallado parte de una cornisa de la misma dependencia pero no en mármol, como es más habitual, sino en estuco.
El arqueólogo municipal de Écija, Sergio García-Dils, que ha dirigido la excavación en la que han intervenido otros 13 arqueólogos y una restauradora de la univer