Mucha gente piensa que las zapatillas deben lavarse cada una vez al mes o, por el contrario, solo cuando están muy sucias. Sin embargo, los especialistas recomiendan una frecuencia intermedia: lo ideal es limpiarlas superficialmente cada 15 días y hacer un lavado más profundo cada 2 meses, según el uso.
El error más común es meterlas directamente en el lavarropas , ya que el centrifugado y el exceso de agua pueden deformarlas y despegar las suelas.
En su lugar, lo mejor es optar por una limpieza manual, suave y con productos adecuados que no dañen los materiales.
Paso a paso: cómo lavar las zapatillas sin arruinarlas
Retirar cordones y plantillas para lavarlos por separado.
Cepillar en seco para sacar el polvo y la suciedad superficial.
Preparar una mezcla suave de agua tibi