El jefe de la policía de Minneapolis, Brian O'Hara, informó que los 17 heridos en el tiroteo registrado este miércoles e n una escuela católica del sur de la ciudad se encuentran fuera de peligro.
El ataque, perpetrado por Robin Westman, de 23 años, dejó además a dos niños muertos, de 8 y 10 años, que participaban en la misa al momento de los disparos .
"Se espera que todas las víctimas restantes sobrevivan", señaló O'Hara en conferencia de prensa, donde detalló que los heridos presentan lesiones de distinta gravedad.
Entre ellos se cuentan 14 menores de entre seis y 15 años, así como tres adultos mayores, de alrededor de 80 años, que asistían como feligreses .
Investigación en curso y armas empleadas
De acuerdo con las autoridades, Westman utilizó tres armas de fuego: