El silencio roto de los montes calcinados y el olor aún latente a humo acompañaron este jueves la visita de los Reyes a Orense . Felipe VI y Doña Letizia quisieron estar presentes en una provincia herida, donde los vecinos cuentan pérdidas y recuerdos entre cenizas, y donde la esperanza empieza a abrirse paso entre el negro de la tierra arrasada. Recibidos entre vítores y aplausos , su llegada supuso un poco de consuelo, trasladando un mensaje de “esperanza” tras lo que el propio Rey calificó como “drama humano” .
La jornada comenzó en Verín, adonde Felipe VI y Doña Letizia llegaron pasadas las 12.30 horas , acompañados por la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen. En el Centro de Coordinación del Distrito Forestal XIV,