Confianza Ciudadana
La política es pasión, bien dicen los viejos que insistían en los peligros al incurrir en una discusión en temas políticos o religiosos, ambos son lugares de pasiones y de emociones que sustentan una postura. La afiliación es eso, la sangre que nos hermana que mas que racional también es emocional. En la religión hay dogmas que suplen los silencios de un argumento, en la política hay gustos que suplen los vacíos de un elemento. Somos animales políticos, nos organizamos en comunidad y aprendemos a defender lo propio y aceptar lo colectivo, con el tiempo maduramos y entonces defendemos lo colectivo y aceptamos lo propio. Las pasiones nos hacen dividir las fuerzas políticas en oficial y oposición, aunque el término implique acciones y no posiciones. Como la posición deter