Una caja fuerte dentro de un banco debe ser uno de los lugares más seguros para guardar dinero. O al menos debería. Así y todo, hace 2 años que en una sucursal ubicada en Guaymallén se esfumaron $135 millones y 40.000 dólares. Hasta el día de hoy, es un misterio dónde quedaron. ¿Un error bancario? ¿Un tesorero que cometió un robo maestro? Las respuestas todavía no llegan.
El misterio nació a principios de 2024 en la sucursal del banco Santander ubicada en Villa Nueva, sobre calles Libertad y Monseñor Benavente. En el mes de mayo las autoridades detectaron que faltaban nada más ni nada menos que $200 millones -entre pesos y dólares- de la caja fuerte. Se inició una investigación interna que tuvo varias esquirlas aunque, hasta el día de hoy, no se ha logrado responder la princ