En apenas media hora, con una actuación descomunal liderada por Joao Neves —autor de tres goles de todos los estilos: de espaldas, de chilena y con un disparo lejano—, el París Saint Germain demolió al Toulouse (3-6) . Fue una de las grandes noticias del inicio de la Ligue 1, que terminó con el sueño del equipo local de la forma más contundente, sin capacidad de reacción ante el campeón.

El conjunto de Carles Martínez había logrado, por primera vez en trece temporadas, ganar sus dos primeros partidos de la liga francesa sin recibir goles. Tenía la valla invicta tras 180 minutos. Pero en solo media hora frente al equipo de Luis Enrique ya había encajado cuatro tantos, que incluso pudieron ser más.

Solo la relajación del PSG evitó un marcador más abultado y un castigo mayor para un Tou

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