La Iglesia católica del Quindío vive un momento de profunda preocupación luego de que los párrocos de Buenavista y Génova , junto con el obispo de la Diócesis de Armenia, Monseñor Carlos Arturo Quintero Gómez , denunciaran ante la Fiscalía General de la Nación una serie de amenazas directas que han puesto en riesgo su seguridad y generado zozobra en la comunidad.
El sacerdote Henry Eduardo Figueroa Ramírez , párroco de la iglesia Nuestra Señora del Carmen de Buenavista y ecónomo de la Diócesis, relató que desde hace meses viene recibiendo mensajes intimidatorios y ofensivos en los que se cuestiona su nombramiento y se ataca su vida personal. Lo más grave, según quedó consignado en la denuncia, es que en los últimos escritos comenzaron a llegar frases con amenazas expl