«Quien pretende poseer la revolución, la pierde» — Hannah Arendt
Un canal que se agotó
La Asamblea Universitaria de la UAEMéx nació como uno de los canales para expresar demandas legítimas: abrir órganos colegiados, transparentar presupuestos, auditar cuentas y democratizar la vida universitaria. Durante un tiempo, articuló la inconformidad de estudiantes, docentes y trabajadores, pero nunca fue el símbolo ni el núcleo del movimiento.
El proyecto democratizador en la UAEMéx es más amplio y sigue vivo en múltiples frentes. Lo que colapsó no es la causa, sino un vehículo: la Asamblea intentó apropiarse del movimiento, monopolizar vocerías y someter agendas. Ese cierre terminó reduciéndola a tribu marginal, aislada y desconectada de la comunidad universitaria. Paradójicamente, su debilitam