CIUDAD DE MÉXICO (AP) — La presidenta mexicana Claudia Sheinbaum defendió el lunes la relación que ha construido con la administración de Donald Trump pese a la aplicación de aranceles, que han enturbiado el vínculo entre los dos vecinos y socios comerciales, y ratificó que las políticas de seguridad se deciden “soberanamente en México”.

En la presentación de su primer informe de gestión, Sheinbaum admitió las “situaciones complejas” que ha enfrentado el mundo ante los aranceles de Trump y resaltó que pese a ese escenario su gobierno ha logrado construir una “relación de respeto mutuo” con el presidente estadounidense. Agregó que espera alcanzar “aun mejores condiciones” en el marco del tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (el T-MEC) que será revisado en 2026.

A fines de julio Trump llegó a un acuerdo con Sheinbaum para postergar por 90 días la aplicación de un arancel general de 30% a los productos mexicanos mientras avanzan las negociaciones, pero se mantuvieron vigentes los gravámenes para parte del sector automotriz, el acero, el aluminio y el cobre.

Como había prometido durante la campaña electoral, Sheinbaum mantuvo en el inicio de su sexenio buena parte de las políticas de su predecesor y padre político, Andrés Manuel López Obrador (2018-2024), aunque le imprimió algunos cambios a la política de seguridad.

De la mano de su secretario del área Omar García Harfuch la mandataria se alejó de la anterior política de no agresión frontal a los grupos criminales e intensificó las detenciones de narcotraficantes y los decomisos de droga.

A su vez envió a Estados Unidos a 55 capos, entre ellos el histórico narcotraficante Rafael Caro Quintero, quien era requerido desde hace años por su vinculación con el asesinato de un integrante de la agencia antidrogas estadounidense DEA.

Pero ello no ha sido suficiente para reducir la violencia en estados como Guanajuato, Sinaloa, el Estado de México, Guerrero, Michoacán, Jalisco, Baja California y Tamaulipas, donde operan los seis cárteles mexicanos que fueron designados en febrero por Estados Unidos como “organizaciones terroristas ”.

La presidenta anunció que en dos días recibirá al secretario del Estado, Marco Rubio, para acordar un “marco de colaboración en materia de seguridad” entre México y Estados Unidos.

Sheinbaum aprovechó para negar una vez más los señalamientos de que las medidas de seguridad de su gobierno responden a presiones externas y dijo que "la política de construcción de la paz se decide soberanamente en México, y nadie influye en ella”.

Si hay un indicador que muestra los resultados favorables de las políticas sociales que ha desarrollado el poderoso partido gobernante Morena en sus siete años en el poder es la dramática reducción de la pobreza.

Según el Instituto Nacional de Estadística de México (INEGI) entre 2022 y 2024 más de 8,3 millones de personas salieron de la pobreza, aunque todavía 29,6% de los cerca de 130 millones de habitantes están en esa condición.

En su mensaje Sheinbaum resaltó la reducción de la pobreza como una “gran hazaña” que consolidó López Obrador durante su sexenio.

Sin embargo, los indicadores económicos no han sido tan favorables. México alcanzó al cierre del primer semestre un crecimiento anual de 0,4% del Producto Interno Bruto, menos de la mitad del que logró en igual período del año pasado.

Siguiendo la impronta de su antecesor, Sheinbaum también dedicó buena parte de su primer año de gobierno a completar una de las iniciativas que impulsó López Obrador: la reforma del Poder Judicial que se consolidará este lunes con la instalación de la nueva Suprema Corte de Justicia.

Pero los nueve miembros del máximo tribunal son identificados como cercanos a Morena, lo que alimenta las dudas sobre la falta de contrapesos y la independencia judicial.

“Comienza una nueva era de legalidad y justicia para todas y para todos. Un verdadero Estado de Derecho”, señaló Sheinbaum al defender las primeras elecciones judiciales que se realizaron en junio y aseguró que con la nueva judicatura “se termina la era del nepotismo, corrupción y privilegios”.

La presidenta también expuso durante su informe las 19 reformas y 40 iniciativas de leyes que impulsó en su primer año y sostuvo que esos cambios ratifican el avance de proyecto político del oficialismo. “Tengan la certeza de que no los voy a traicionar. Con la fuerza de México, de nuestro pueblo, caminaré sin descanso, con rectitud, con valentía y honraré siempre la confianza depositada en mí”, añadió.

Aunque Sheinbaum —la primera mujer en llegar a la presidencia de México— procuró desde el inicio de su mandato darle su marca personal a su administración, la comparación con su antecesor siempre fue inevitable, indicó el politólogo y consultor político Javier Rosiles Salas, quien aseguró que el primer año de gestión de la mandataria sólo puede verse como el “séptimo año de gobierno” de López Obrador.

“Es tan evidente que se trata de un gobierno de continuidad”, dijo Rosiles Salas a The Associated Press al reconocer que a Sheinbaum “todavía le falta algún tiempo para ver si ya logra desmarcarse”.