Por. Rossy Antúnez, responsable de familias transnacionales, Instituto para las Mujeres en la Migración, AC (IMUMI).
Hace una década, cuando el actual presidente de Estados Unidos buscaba por primera vez ocupar la Casa Blanca impulsando un discurso antiinmigrante, personas migrantes retornadas y organizaciones de la sociedad civil, como el Instituto para las Mujeres en la Migración, AC (IMUMI), emprendimos un trabajo para garantizar el derecho a la educación de las niñas, niños y adolescentes mexicanos en retorno. En ese contexto dedeportaciones, logramos establecer mesas de trabajo con la Secretaría de Educación Pública (SEP) que culminaron en cambios normativos sustanciales: se eliminó el requisito de apostilla para la revalidación de estudios, se garantizó el acceso y permanencia en el