Un juez federal en Washington D.C. detuvo de manera temporal la iniciativa de la administración de Donald Trump que buscaba ampliar las deportaciones rápidas de migrantes dentro del territorio de Estados Unidos .
La medida representa un golpe a la estrategia del presidente, quien había prometido implementar un plan de un millón de expulsiones al año durante su nuevo mandato.
El freno judicial a las deportaciones aceleradas
La magistrada Jia Cobb , designada en su momento por Joe Biden, consideró que el esquema impulsado por el Departamento de Seguridad Nacional viola el derecho al debido proceso de los afectados.
En una extensa opinión de 48 páginas, advirtió que priorizar únicamente la velocidad en los procedimientos de expulsión "conduciría a errores graves y pondría