Por Julio C. Borda *
Si hay un libro que retengo en mi memoria con suma claridad, ese es “Don Segundo Sombra” cuyo autor, Ricardo Güiraldes , fue un escritor que a pesar vivido en París durante muchos años, sentía por su pago de San Antonio de Areco, en la Provincia de Buenos Aires, un amor incondicional que lo supo reflejar a través de su obra maestra. Pues bien, en esos pagos transcurre la novela.
Una obra gauchesca que supo escribir con una prosa exquisita, fuera de lo común . Frases construidas con un talento insuperable, que se acercan a la perfección. Güiraldes sin duda, tuvo una inspiración poco común al escribir esas páginas antológicas.
Quien tuvo el privilegio de leer esta obra magnífica, habrá disfrutado de la descripción de paisajes, de comportamientos, de conductas típic