El escándalo desatado por la filtración de audios de la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei , generó un fuerte cimbronazo puertas adentro del oficialismo y derivó en medidas inmediatas para reforzar la seguridad en la Casa Rosada . Según trascendió, el Gobierno dispuso cambios en los protocolos de control que aplica Casa Militar, con el objetivo de prevenir que situaciones similares vuelvan a repetirse.
A partir de ahora, los salones donde se celebren reuniones oficiales serán sometidos a barridas electrónicas para detectar dispositivos ocultos de grabación , y se pedirá a los asistentes que dejen sus teléfonos celulares antes de ingresar a los encuentros. Este esquema de seguridad ya regía para las audiencias del presidente Javier Milei , pero desde