El pasado 31 de agosto de 2025, un deslave de enormes proporciones sepultó el poblado de Tarasin, en las montañas de Jebel Marra (Montañas Marrah), en Darfur central, al oeste de Sudán. El movimiento masivo de tierra fue provocado por días continuos de lluvias intensas y prolongadas que saturaron el terreno, lo que desestabilizó el suelo hasta desencadenar el colapso total del poblado, tal como relata The Guardian . Un deslave brutal borró del mapa una aldea entera, matando a más de mil personas y dejando solo un sobreviviente inmóvil entre toneladas de tierra. El drama muestra que, sin alertas globales efectivas, hasta los refugios se convierten en trampas mortales .
Resulta casi inconcebible que solo una persona sobreviviera: hallada con graves heridas, en estado inconsciente tras