Aseguramos el lunes, en este mismo espacio, que la Presidenta ya deshoja la margarita en la intimidad, para seleccionar a su candidato; y también dejamos claro que ella sabe perfectamente, que desde que dijo “sí protesto” y bajó el brazo, comenzó la cuenta regresiva para dejar el poder.
A diferencia de López Obrador, que desde el inicio de su mandato tenía definido que la jefa de Gobierno sería la abanderada de la 4T, Sheinbaum no lo tiene aún muy claro.
Quien se trague a estas alturas que las otras “corcholatas” tenían posibilidades, peca de gran ingenuidad política. AMLO quería a la ex delegada de Tlalpan, porque ella, y sola y únicamente ella, garantizaba la continuidad.
¿Será una mujer o varón ? ¿Saldrá de su oficina o de alguna Secretaría ? ¿Acaso