Para evitar que medidas desesperadas de autoridades provoquen problemas sociales.
Ante información de los servicios de Inteligencia sobre las consecuencias que ha generado la tardía reacción de las autoridades de implementar un plan de contingencia que podría colisionar con la normatividad vigente y generar denuncias por abuso de autoridad, contra los titulares de las entidades que expidan “normas extraordinarias” no consideradas en ley, se ha dispuesto el envío de contingentes policiales a Urubamba y Machu Picchu para evitar conflictos sociales.
Y es que los planteamientos que se hicieron de conocimiento a pocas horas de vencer el contrato del actual concesionario en la ruta Hiram Bingham no solamente contradicen las normas, sino que también han despertado la reacción de la población.