Por Carlos A. Valduvino

Cuando Agustín Cuello tomó y besó la pelota para ejecutar el último penal de la serie, que le podía dar el título de Campeón de la región Centro, el puñado de simpatizantes del fútbol regional y el grupo de dirigentes que acompañó al plantel, junto con el cuerpo técnico y jugadores, se enconmendaron a la Virgen del Valle de Catamarca para que la pelota que iba a impulsar el centrodelantero de Asociación Atlética besara la red para soltar el grito de “campeón”.

Y el “Cara” no falló. Le pegó fuerte con el balón al palo derecho de Manuel Soria, que se quedó petrificado en el medio del arco y con ello, la selección de fútbol de la LRFRC se quedaba con la definicion por penales por 4 a 2 ante su par de la Liga Catamarqueña de Fútbol, en la final de vuelta de la región

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