En la costa oeste de la Bahía de Hudson, en la provincia canadiense de Manitoba, se encuentra Churchill , un pequeño pueblo considerado la “Capital Mundial del Oso Polar” , debido a que cada año, cientos de estos depredadores hacen ahí una parada obligatoria en sus migraciones, convirtiendo al lugar en un punto de observación natural único en el mundo.
Según el diario británico The Guardian , cuando el verano derrite el hielo marino, dichos mamíferos se ven obligados a permanecer en tierra firme, esperando hasta noviembre para que el hielo vuelva a formarse. Para octubre , varios de ellos ya se encuentran deambulando por la zona, lo cual representa un desafío para la seguridad de la población local y de los propios osos.
No obstante, de acuerdo con Polar Bears Internationa