Hace tres años “Pinocho” , de Guillermo del Toro , fue un fenómeno mundial. Abarrotó cines independientes donde tuvo funciones especiales, se registró como una de las cintas más vistas en Netflix y coronó su marcha con la obtención del Oscar en la categoría de Largometraje de Animación.
México no fue la excepción. Aunque el cineasta tapatío no pudo promoverla en suelo nacional, la tarea fue encargada a los animadores mexicanos que se encargaron de la escena llamada internamente “la noche de los conejos”, en la que el niño de madera convive con estos pequeños animales.
Las marionetas originales incluso llegaron a una exposición en Cineteca Nacional , donde la película vendió cerca de 50 mil boletos, con lo prácticamente hizo que la asistencia a la misma se duplicara.
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