Dos uniformados del Ejército Nacional fueron víctimas de un violento ataque el pasado miércoles 3 de septiembre en la vereda Siloé, zona rural del municipio de Villagarzón, Putumayo. Los hechos ocurrieron mientras las tropas adelantaban una operación para desmantelar un laboratorio de procesamiento de pasta base de coca, como parte de las acciones contra el narcotráfico en la región.
Durante la intervención, un grupo de civiles —presuntamente influenciados por el grupo armado ilegal Comandos de Frontera— rodeó a los militares y los atacó. En medio de la asonada, los uniformados fueron rociados con gasolina y posteriormente incendiados.
Las víctimas fueron identificadas como el subteniente Miguel Ángel Mejía Gutiérrez y el soldado profesional Sebastián Díaz Amaya. Ambos sufrieron quemadur