El estadio Monumental de Buenos Aires fue escenario de una noche histórica este jueves 4 de septiembre. Lionel Messi, capitán y emblema de la selección argentina, disputó su último partido oficial en casa por Eliminatorias Sudamericanas y lo hizo a lo grande: marcando dos goles en la victoria 3-0 frente a Venezuela, en medio de la ovación incesante de unos 80.000 aficionados que lo despidieron entre lágrimas y aplausos interminables.
El rosarino, de 38 años, convirtió al minuto 39 y nuevamente al 80, en un duelo donde la emoción se mezcló con el fútbol. Lautaro Martínez también se hizo presente en el marcador al 75, sellando un triunfo que ratifica el dominio de la campeona del mundo, ya clasificada al Mundial de Estados Unidos 2026 con varias jornadas de anticipación.
Una despedida carg