En un momento histórico en el que la industria del entretenimiento se reinventa a pasos acelerados, el nombre de Eduardo Basagaña aparece con fuerza como uno de los empresarios más influyentes y disruptivos de América Latina. Este argentino, con más de diez años de experiencia en la gestión y desarrollo de talentos, ha decidido apostar por México no solo como mercado estratégico, sino como el escenario ideal para consolidar una nueva era en la música: aquella que combina cultura, innovación y tecnología.
Su recorrido no es menor. Basagaña ha colaborado con artistas que hoy definen la música global, entre ellos Karol G, Mon Laferte, Pimpinela, Aitana y Ana Mena. Pero más allá de las giras, discos y producciones, su sello está en la capacidad de anticipar cambios en el consumo musical