Cómo es posible que a alguien le pueda parecer buena noticia que, al cabo de cuatro años, se le diga a la región que sí, pero que solo se van a hacer dos kilómetros de los trece prometidos. Desazón y desesperanza, por decir lo menos, es lo que producen las declaraciones de los distintos dirigentes gremiales, empresariales y cívicos de la ciudad y la región, empezando por el coordinador de la veeduría cívica del proyecto Vías del Samán, Luis Fernando Saenz, luego del anuncio, cuatro años después, del inicio de la obras de construcción de la segunda calzada en la variante La Romelia – El Pollo. A todos los dirigentes del Departamento, con excepción del gobernador Juan Diego Patiño quien dijo claramente no estar contento, les pareció extraordinario y esperanzador que una obra que debió in

See Full Page