El primer ministro británico, Keir Starmer , se enfrenta a una nueva tormenta política tras la renuncia de Angela Rayner , su viceprimera ministra, secretaria de Vivienda y líder adjunta del Partido Laborista, quien se vio forzada a dejar el cargo luego de que una investigación oficial concluyera que no cumplió con los estándares éticos de gobierno en relación con sus obligaciones fiscales.
La salida de Rayner, considerada hasta hace poco uno de los rostros más fuertes del laborismo, ha derivado en una reorganización ministerial inesperada y turbulenta que pone en entredicho la capacidad de Starmer para estabilizar su Gobierno, apenas días después de haber intentado lanzar una ambiciosa “Fase 2” de su proyecto político tras un verano marcado por encuestas desastrosas y un clima int